Maravillosa esta ilustración. Llena de ternura y de una inmensa pasión. Fijaos como uno de ellos le rodea con sus brazos y tiene las palmas de sus manos totalmente sobre el costado y la espalda de su amante, mientras descansa y disfruta de la sensación de su propia erección.
Aquí hay amor, una profunda necesidad de fundirse y ser uno con el otro, el anhelo urgente de olvidarse de uno mismo y ser con el otro.
Pensad cuantas veces hemos sentido nosotros algo así. Es un sentimiento que provoca extrañeza, que nos arroja fuera de nosotros mismos en busca de la profundidad del otro para encontrarnos en el mismo.
En sencillamente maravilloso
Muy buena la foto!!!
ResponderEliminarMe gusta que haya gente como yo a la que le gusten los hombres velludos. En estos tiempos en donde la moda es estar o ser lampiño, la gente que gusta del vello es escaza. Felicidades por tu blog!!
Vaya , vaya que mi amigo se ha levantao romantico y todo un escritor como siempre, muy muy narrativa.
ResponderEliminarTio eres un genio de la narrativa y del erotismo grafico.